viernes, 1 de marzo de 2013

Accidente cirujano-plástico.

19 de junio del 2012
Bueno, vale, como lo explico... (pocas palabras y mensaje directo, que llegue al espectador...): Me comí una barandilla, sí qué pasa!
A los que me hayáis visto por ahí, con una mano en el costado a lo Napoleón "Boina a parte", no es una nueva moda, es que soy gilipollas, simplemente!
¿Por qué? Por no dejarme los dientes al final de la escalera. ¿Por qué? Unos dirían que es porque soy pobre, yo porque he probado alternativas ecológicas, pero la conclusión es que no tengo para operaciones de estética, creí que era más idóneo clavarse una barandilla en las costillas con la esperanza de arrancármela y tener más cintura, pero no lo hice bien, no! Lo que tengo es una contusión-esguince-hostia-que-duele-que -te-cagas en el costillar derecho, y en vez de cinturita de avispa lo que me ha quedao es una cinturota de hipopótamo. Joder! parezco la elefanta Elly del Pocoyó, no puedo bajar el brazo! El lado positivo es que el sobaquillo derecho no necesita desodorante, se airea solo...No necesito flotador para el verano, gracias, sé nadar, pero si no supiera, la inflamación me ayudaría a flotar, Sería como una boya en alta mar... (que no p...).
Menos mal que ya puedo respirar con normalidad porque parecía que estuviera pariendo con respiraciones cortas... que ayer celebré el gol de España deletreando G de gato-O de Oviedo-O de Oviedo-O de Oviedo-O de Oviedo-L de Lima-exclamación-exclamación-exclamación para que no me doliera coññño!...

En fin, sobreviviré, y eso que lo siguiente que iba a probar que me picara un enjambre de avispas en las tetas para subírmelas, pero creo que paso, que prefiero notar la temperatura del suelo cuando me levanto para saber qué me pongo... 

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